lunes, 11 de julio de 2016

La casa torcida

Aquí estamos, una quincena más. Esta vez le toca el turno a La casa torcida, novela de 1949.

En esta ocasión no nos encontramos con ninguno de los personajes habituales de Doña Agatha, sino con el asesinato de un multimillonario griego que mantiene a toda su familia generosamente. Nadie sale realmente beneficiado con su muerte, nadie sale tampoco perjudicado. El hijo de un detective de Scotland Yard tiene que resolver el misterio si quiere que la nieta del asesinado acceda a casarse con él. Una unida familia que llora la muerte de un octogenario que se había casado recientemente con una jovencita a las que todos desean culpable pero creen inocente. Y, como de costumbre, con la señora Christie, nada es lo que parece ni mucho menos.

Veamos qué opinan nuestras lectoras

Empezamos con Pi

Pedazo novela de Agatha que extrañamente no es de las más conocidas. Es lo de siempre pero completamente distinto. Nada de Poirot,  de campiña inglesa ni de parientes sosos. En una familia atípica se produce un asesinato. Como siempre son todos sospechosos pero sus personalidades y motivaciones difieren de a lo que estamos acostumbrados.
La historia atrapa desde el minuto uno. El final es sorprendente y bien cerrado. Una maravilla que ha entrado en mi lista de favoritos por la puerta grande.

Seguimos con Pau

Hacía tiempo que no me pasaba algo así y menos con un libro de Doña Agatha. Por lo general me interesa el ambiente más que el misterio, pero en esta ocasión me ha atrapado la búsqueda del asesino hasta el final... y qué final, estoy en shock. 

El título es sensacional, para empezar porque la casa está torcida no por sus cimientos -que también- sino porque sus habitantes son de lo más retorcidos, en esta familia nadie es lo que parece, salvo los que parecen perversos, que son mucho más perversos de lo que parecía o mucho más generosos... con una generosidad un tanto particular, todo sea dicho.

Puede que me equivoque, pero creo que Doña Agatha hace un excelente experimento con este ejercicio de estilo al apartarse de los lugares comunes que venía manejando. Cierto es que hay amor, como siempre, una familia con mil secretos, como siempre, criados pululando, como siempre, pero esta vez todo es distinto, o al menos eso me ha parecido a mí.

Si esta novela se llevara hoy al cine no sería una película policíaca, sería de terror, no les digo más.

Terminamos con MG

Por fin, después de año y medio desde que empezamos esta hazaña lectora...por fin hemos llegado a mi novela favorita de Agatha. La culpa es de mi madre, que me lo colocó cuando yo tenía unos 12-13 años, que es una edad estupenda para empezar este proyecto y la mejor edad para leer precisamente esta novela.

Y es que todo está bien hecho aquí: los personajes están bien definidos, la trama es sencilla, descansamos un poquito de Poirot, que también nos lo merecemos y además, dentro de esa sencillez de la trama mantiene el esquema clásico de muerte/tranquilidad/segundo muerto/final impactante. Este es uno de los casos en los que Doña Agatha siente una infinita piedad por su culpable, que es algo que me gusta de ella, no todos los asesinos son iguales. Así nos entretenemos más.

Es fabuloso. Corred todos a leerlo pero YA.

Algunas cosas que he marcado

"La mayoría de la gente no puede ser extravagante porque ha de ganarse la vida."

"Nunca he encontrado un asesino que no fuera vanidoso...nueve veces de cada diez es su vanidad lo que les lleva a la ruina. Aunque tengan miedo de que los cojan, no pueden evitar pavonearse y alardear y, por regla general, están convencidos de que han sido demasiado listos para que los cojan. Y hay otra cosa: el asesino necesita hablar."


Volvemos en dos semanas con Se anuncia un asesinato. Mientras tanto, tengan cuidado ahí fuera.

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