lunes, 16 de febrero de 2015

Los cuatro grandes


En esta ocasión volvemos a encontrarnos con Poirot y su persecución a una organización criminal, conocida como "Los cuatro grandes", que quiere acabar con la civilización tal y como la conocemos. 
Hastings ha vuelto de Argentina y iremos con ambos tras la pista de un chino, un millonario norteamericano, una francesa y un misterioso cuarto hombre que van dejando tras de sí un reguero de cadáveres.

Vamos a ver qué es lo que piensa Bichejo de esta novela:


La otra vez que inicié este proyecto ya lo leí, de todas maneras he vuelto a leerlo. Tengo pillado el punto a Agatha y son dos días. Ir y venir al curro dos veces y liquidado.

Ha merecido la pena la relectura. Es una de las novelas más entretenidas. Y más tramposas. Lleva las trampas hasta el disparate, pero a mí me ha dado igual, me lo estaba pasando taaaan bien.

En realidad parecen historias cortas unidas sólo por esos Cuatro grandes del título. Seguramente si las analizamos mucho se caen por todas partes. Pero a veces no importa mucho que algo sea creíble, si te tiene pasando páginas como una loca. Esta es una de esas veces. 

Me gusta mucho más Poirot cuando va con Hastings.

Annie:

Pues a mí no me ha gustado mucho. Como dice Bichejo son historias cortas unidas con la excusa de los cuatro grandes. Una mezcla de historia de las de Tommy y Tuppence pero protagonizada por Poirot y Hastings que se van encontrando misterios del estilo de los de Poirot. Se me ha hecho largo y además unos de los crímenes es parecidísimo al de Ackroyd. 

He subrayado poco, este pensamiento de Hastings nos devuelve a esos comentarios machistas que parece que habían desaparecido. Pues no: "Siempre me ha parecido extraordinario que una mujer haya llegado tan lejos en el mundo de la ciencia, porque siempre he pensado que para desempeñar tareas de esa naturaleza se necesita un cerebro puramente masculino". 

Paula:

Lo malo de dedicarte a leer una novela de un género concreto de una autora concreta cada quince días es que es inevitable acabar viéndole las costuras, ahora bien, lo de menos en estas novelas es el misterio, da igual quién muera y quién mate, lo importante es el desarrollo de la investigación y sus vericuetos y tengo que decir que en esta ocasión las aventuras de Poirot y Hastings me han parecido absolutamente descacharrantes.

Por lo general, me va a ganar cualquier historia en la que haya una organización criminal para controlar el mundo y en la que los malos se rían en plan mwahahahaha y que traten de engañar al héroe que a su vez usa esos engaños para engañarles. Me he reído a carcajadas leyendo ese empalmar maldades disparatadas sin ton ni son y me consta que me han mirado raro por los ruidos de risa ahogada al leer el siguiente fragmento:

-¡Pero el tren no para hasta Calais!-Parará si pagamos para que lo haga.-¡Vamos Poirot! NO pensará usted en pagar para que le detengan el expreso. Se negarían.-Mi querido amigo, ¿no se ha fijado nunca en la manivela de la señal de alarma? Tengo entendido que la multa por su uso indebido es de 100 francos.
Pi:

El prototipo de libro de Agatha es el asesinato doméstico donde los todos los que vivían o pasaban por allí pasan a ser sospechosos.
Pues en este caso la autora va a lo grande. Cambia las ancianitas envenenadas con arsénico por una organización criminal internacional nada menos.
Reconozco que el libro puede llegar a resultar absurdo a veces, pero divertido es un rato. Y hay un par de situaciones que se resuelven de forma brillante.
Estoy segura que Agatha aquí quería innovar y hacer algo distinto. Quizá había leído alguna novela similar y se vino arriba. No es lo suyo, ni a lo que nos tiene acostumbrados, pero en este caso he agradecido la innovación.

La siguiente novela de Doña Agatha será El misterio del tren azul y hablaremos de ella el 2 de marzo. Tengan cuidado ahí fuera.

miércoles, 4 de febrero de 2015

Felicidades Bichejo (bis)

La prensa mundial está que echa chispas ¡han aparecido dos páginas mecanografiadas de la famosa obra perdida de Doña Agatha Una rubia peligrosa! ¡y, para mayor fortuna, ha aparecido el día del cumpleaños de Bichejo! corran a felicitarla si aún no lo han hecho y, si ya lo  han hecho, ¡háganlo otra vez!

Pero bueno, al lío, les dejamos aquí, queridos amantes de los misterios de Doña Agatha, el fragmento encontrado ¡estamos deseando que aparezca la novela entera! crucemos los dedos.


-¡Oh! ¡Vaya un detective listillo! -dijo el famoso detective Poirot- Mire al muerto ¿Acaso cae un hombre apuñalado en el corazón de ese modo tan extraño? No. Por otra parte: ¿permitiría un hombre de esa corpulencia que ni Fassbender ser acuchillado por la espalda de ese modo sin levantar la mano para defenderse? Absurdo, completamente absurdo. Pero mire aquí..., y aquí... -y en el polvo blanco del suelo, alumbrado por el rayo de luz de la lámpara, vi curiosas marcas irregulares- Fue arrastrado aquí después de muerto con la intención, sin duda, de que cogiera algo de solecito antes del rigor mortis, que ya ve usted que está de un blanco que da asquito y el asesino, o asesina, -Poirot miró en torno a la habitación con gesto teatral- denota ser alguien a quien le preocupa mucho el aspecto incluso después de muerto. Sus huellas no se ven en el suelo duro de fuera, y aquí, han tenido buen cuidado de borrarlas, pero sin duda son... son... ¡huellas de mujer!



Se oyó un gran estrépito, la misteriosa rubia de pelo brillante se había dejado caer sobre la mesita en al que estaban expuestos los productos de belleza que se iban a vender antes de producirse el asesinato.

-Mentira -gritaba la rubia- ¡eso es mentira! Esas huellas no son mías... digo... ¡no son de mujer! y si él no se defendió... será porque prefirió suicidarse antes de perder mi amor, porque yo le estaba dejando, sabe usted... además no lo maté, demonios, se suicidó -rompió en un agudo llanto- sí, ea, ya lo he dicho, cuando supo que ya no podía casarme con él dijo que no quería vivir y que me iba a enterar, que si no era para él no sería para nadie pero que, como no podía hacerme daño, prefería suicidarse y culparme, así que se clavó ese puñal en la espalda -levantó la vista- es que todo lo que tenía de guapo, lo tenía de bobo...

-Aaaaay -suspiró Poirot- deje de llorar, querida, ya sabía yo que poniendo en funcionamiento mis células grises saldría toda la verdad... ¿Cómo no acudió a mí antes?...




El parlamento de Poirot se vio interrumpido de pronto ante el movimiento del cadáver -Conde Mor- gritaron todos -¡está usted vivo!- se le veía en buen estado, algo pálido a pesar de haber permanecido inmóvil al sol los dos días que duraron las investigaciones.

Sí -dijo el Conde Mor- estoy vivo y perfectamente, el motivo por el que fingí mi muerte es noble, no obstante, y ustedes lo saben -y guiñó un ojo a Poirot que le guiñó a su vez un ojo a Hastings, que le guiñó a su vez un ojo a la bella y perpleja rubia- y es que amenazabas con irte, mi amor, no dejarme, que eso se me hace insoportable pero mientras pueda amarte aunque no te tenga la vida merecerá la pena, pero amenazabas con irte sin que pudiéramos celebrar tu cuarenta cumpleaños... y eso no podía consentirlo; tu boda con Hastings (que se lo va pidiendo a todas las mujeres con las que se cruza, que lo sepas) me duele, pero allá tú, pero irte sin que pudiera felicitarte no, de ninguna manera.

¡No se casa conmigo, pedazo de imbécil! -proferí a gritos- que mira que te lo he explicado veces, que ya está felizmente casada y no atiende a mis ruegos; simplemente se va de viaje para no volver porque dice que sólo sabemos hablar de moscas, así que acabemos ya con la pantomima de la muerte y celebremos por fin el

CUARENTA CUMPLEAÑOS DE BICHEJO
¡FELICIDADES!

Felicidades Bichejo

Twitter es como la vida misma.
Llegas de nuevas y te acercas de puntillas a un grupo. Escuchas, te vas asomando y tímidamente comienzas a hablar. Así comienza tu vida 2.0.
Con el tiempo unos van y otros vienen. Unos se callan y a otros hay que callarlos. Están los que aparecen por casualidad y se convierten en imprescindibles y los que pasan por tu TL sin pena ni gloria.
Al final dejas de preocuparte de a cuantos sigues y cuantos te siguen. En el fondo ya da igual porque tras todo el trasiego virtual has formado un grupo. Un grupo de gente que te acompaña en el coche, en el trabajo, en los días buenos y los malos momentos. 
Curiosamente vas descubriendo que estos seguidores tienden a seguirse entre ellos cerrando así el circulo. 
Un mundo curioso este de las redes sociales; difícil de entender para no iniciados.
Bich, mi colega en este proyecto Agatha, forma parte de esta familia virtual. No nos conocemos, no la pongo cara, pero ahí estamos sacando adelante un proyecto común y siguiéndonos las vidas mutuamente a través de las redes sociales. 
Por eso, cuando me ofrecieron formar parte de esta felicitación  multitudinaria, no dudé un segundo.
Felicidades Bichejo por tu 40 cumpleaños. Un placer formar parte de tu vida 2.0.
Besos,
@chamay - Pi