lunes, 22 de mayo de 2017

En el Hotel Bertram


Ya estamos en 1965, son tiempos modernos, pero algunos turistas aún desean hospedarse en el Hotel Bertram, que reúne toda la tradición inglesa, pero con las comodidades más actuales. 
En él conviven personas de todas las nacionalidades y estratos sociales, pero algo turbio está pasando...

Una rica heredera, su madre, sus tutores, un párroco y Miss Marple son los personajes principales.

Veamos que opinan nuestras lectoras

Empezamos por Pi

Me ha encantado la ambientación del libro, un hotel de otra época. Para mí que se nos puso nostálgica Agatha. 
Aunque es un libro de Miss Marple,  ni pincha ni corta, y mucho menos resuelve. Nada de cosas que le recuerdan a su prima, a la hija del panadero ni a nadie. Miss Marple sentada en una butaca del hall en plan jarrón.
La trama es un galimatías de cuidado. Que si uno desaparece, pero que al final no era eso lo importante, pero que ya que estamos investigamos igualmente. Y cuando lleva 2/3 escritos Agatha se debe dar cuenta que se ha olvidado del muerto. Que la policía está investigando no se sabe muy bien qué porque no hay asesinato que valga. 
El final mejora un poco la historia, pero no termina de enderezarla.
Ni fu ni fa.

Seguimos con Pau

Vamos directos al grano: La ambientación de la novela es maravillosa, la historia no tanto, un jaleo de piezas que aparentemente no tienen relación pero que es obvio que van a coincidir porque si no para qué demonios se molesta Doña Agatha en hablarnos de unos y otros.

Pero lo bueno, como decia, la ambientación: la señora Christie es tan consciente de que sus novelas parecen todas escritas en la misma época que se las ingenia para que no chirríe y nos cuela un hotel de preguerra con sus damas y caballeros ingleses en plenos años 60... A ver, que ahora, cincuenta años después, nos da lo mismo, pero me imagino que un lector que compraba cada libro de la autora en cuanto salía quizá necesitaba una justificación de por qué todo parecía estar ambientado en los años 30.

Miss Marple anda por ahí como vieja cotilla que observa y se entera de todo, pero la verdad es que en esta ocasión podía no estar, vamos, como Indiana Jones en En busca del arca perdida, que no influye para nada en la trama, pero aún así sigue siendo entrañable porque, como dice en la novela ennuna maravillosa descripción que merece la novela, tiene todo el aspecto de la tía abuela universal.

Finalizamos con MG

No sé si es que ya empiezo a estar necesitada de vacaciones de Agatha, pero es que no me ha gustado.


Miss Marple está prácticamente haciendo bulto, sólo hay un asesinato (#pocosmuertos, se reían ayer en mi Instagram) y es en el cuarto final del libro. Y encima, el asesino se libra por la confesión más inverosímil y más salida de ningún sitio de todas. Cada que Agatha se sale de lo conocido e intenta meter otras tramas (espías, elementos sobrenaturales...) le sale un libro que a mí personalmente no me gusta nada.

Por decir algo positivo, me ha hecho gracia que nombre a los Beatles, nos sirve a nosotras, como lectoras, a tomar conciencia de todo el camino que hemos recorrido.

 Nos vemos dentro de dos semanas con Tercera muchacha. Mientras tanto, tengan cuidado ahí fuera.

lunes, 8 de mayo de 2017

Misterio en el Caribe



Con todos los gastos pagados por su sobrino, Miss Marple va a pasar el invierno a una isla del Caribe donde los días pasan monótonos para todos. De pronto, uno de los huéspedes, el Mayor Palgrave, que siempre cuenta las mismas batallitas, muere. Y las sospechas de Miss Marple parecen ser ciertas: el Mayor ha sido asesinado, más concretamente, envenenado. Con toda probabilidad, el Mayor sabía algo que no podía ser descubierto. Miss Marple decide investigar el crimen antes de que haya nuevas víctimas.

Veamos que opinan nuestras lectoras

Empezamos por Pi

Se me ha hecho eterno este libro. Quizá no sea sólo culpa de Agatha sino que es de estos que te pilla el toro y acabas leyendo tarde, mal y nunca.
Muy previsible y con personajes que parecen refritos de otros libros. A estas alturas del proyecto cada vez se hace más complicado encontrar argumentos originales, aunque todavía Agatha nos sorprende de tanto en tanto.
Es de los libros que voy a olvidar en breve y que si vuelvo a leer en un par de años no recordaré absolutamente nada. Aun así tampoco puedo no recomendarlo, simplemente es uno más.


Seguimos con Pau

Tenemos un montón de personajes pero sin ser demasiados y una trama tan clara tan clara que se me ha hecho absolutamente previsible y es que, amoavé, Doña Agatha, no me cuente usted cómo se van a desarrollar los acontecimientos a, principio de la novela, que gran parte del chiste de sus novelas es ir descubriendolos poco a poco.

A pesar de ello conste que me ha resultado entretenido quizá porque al,fin y al cabo lo de menos a estas alturas es la solución y lo de más cómo llegamos hasta ella, sin saltos ni trampas; me han hecho mucha gracia las n veces que Miss Marple no veía cosas que el lector sabía ¡Hasta daban ganas de gritárselas como si fuera tu abu olvidadiza!

Finalizamos con MG

Me lo he pasado bien. Vuelve a los elementos comunes que tanto me gustan de Agatha, sobre todo, gente que muere por bocazas y por hablar de más.

Vuelve otra vez a mostrar una amplia variedad de personajes, que es lo que mejor se le da, con parejas que no se llevan todo lo bien que pretenden hacernos creer y en una novela en las que, como siempre, no todo el mundo es quien dice ser. Tarda en ponerse interesante, pero el tramo final de la novela lo compensa.

Volvemos en dos semanas con En el Hotel Bertram. Mientras tanto, tengan cuidado ahí fuera.