lunes, 30 de marzo de 2015

Muerte en la vicaría

Ya estamos otra vez aquí, y por fin, en el décimo libro, nos encontramos con la señorita Marple. Que ya era hora de llegar a Saint Mary Mead.

Vamos a ver qué dicen nuestras lectoras

Empezamos con Pi

Al fin aparece mi querida Miss Marple, que ya iba teniendo ganas. Y digo querida porque así la recuerdo, como un personaje que me gustó alguna vez que leí un libro que protagonizaba. En este me ha llamado la atención porque es un personaje totalmente secundario ¿Será que en un principio era una vecina más del pueblo y luego cobró protagonismo en la mente de Agatha? Lo iremos viendo. El libro recomendable aunque para nada de los mejores. Buena historia un poco traída por los pelos.  Para mí queda en un libro introductor a estos nuevos personajes que nos acompañarán en próximas novelas. Por cierto, hace poco leí el libro de la señorita Buncle de la también muy conocida D.E.Steveson. Al leer Muerte en la vicaría me he dado cuenta que el pueblo y los personajes son demasiado parecidos. Corriendo a la Wikipedia a ver cuál se escribió primero y ... La original es nuestra querida Agatha. El otro se escribió en 1934; cuatro años después. Curiosamente no he encontrado ninguna referencia a esta similitud, pero de verdad que no puede ser casualidad.

Esto es lo que le ha parecido a Paula

Como yo soy nueva en estas cosas de Doña Agatha sólo puedo expresar mi alegría cuando por fin aparece en la maravillosa -y mortalmente aburrida- campiña inglesa el nombre de Miss Marple, la solterona insoportable y metomentodo -¿hay alguna solterona que merezca tal nombre -que no reúnen ni de lejos todas las mujeres solteras a partir de cierta edad- que no sea insoportable? Si doña Agatha estaba obsesionada con las bodas no hay que ser muy inteligente para ver qué podía pensar de las solteronas, en cualquier caso, nuevamente vemos una mano femenina de la autora al ver una mujer así.

Lo único es que en esta novela Miss Marple no aparece como yo pensaba, es decir, no tiene la presencia ineludible que tiene, por ejemplo Poirot, pero por lo que veo en mis compañeras de proyecto no es lo habitual así que respiro aliviada. En cuanto a esta Muerte en la Vicaría, más Agatha, más asesinato con resolución cogida por los pelos (que no, que no y que no, que no encaja nada nunca, no hay pistas previas), más disparate, más amores grandilocuentes y relaciones ilícitas. Como en todas las que llevamos hasta la fecha en algunas páginas -aunque menos de lo habitual, a qué negarlo- me he reído a carcajadas, especialmente en las descripciones de los personajes.

Annie Hall nos cuenta esto

Yo también tenía ganas de llegar a Miss Marple pero, como Paula, no pensaba que fuera a ser tan secundaria. Tampoco sé si gana presencia o siempre es así, que aparece de vez en cuando para quedar como metomentodo y cotilla para luego resolver estelarmente el caso. Iremos viendo.

Sin haberme disgustado esta Muerte en la Vicaría tampoco me ha gustado especialmente. Me lío con tantas Misses lugareñas intercambiables entre sí. La verdad es que, al menos en este caso, tampoco afecta mucho a la trama pero me despista un poco. Aquí además del misterio hay un poco de novelón rosa que se ve venir desde el principio. Lo dicho, ni fu ni fa, entretenido sin más.

Respecto a las semejanzas con Miss Buncle, que comenta Pi y que yo también leí recientemente, no las he encontrado más allá del ambiente y las gentes de la campiña inglesa.

Termino con una frase: "No existe en Iglaterra detective alguno tan sagaz como una solterona de edad indefinida, sin nada que hacer durante todo el día".
 
Y terminamos con Bich

¡Qué ganas tenía de llegar a Miss Marple! Aunque debo decir que espero que gane más presencia a lo largo de los libros, que aquí sale sólo tangencialmente.

Esta vez no iba muy desencaminada en cuanto a la identidad del asesino, y me ha hecho bastante ilusión, porque suelo fallar más que una escopeta de feria, y el otro "minimisterio" lo tenía claro desde el principio.

La novela no puede ser más típica, y como el protagonista ya está casado, pues que tenga hijos al final. Doña Agatha es una tradicional y supongo que esa cosa familiar es también parte de lo que ella entiende como final feliz.

He marcado bastantes cosas, pero destaco esta: "Nada es jamás normal en un crimen. El disparo no fue un disparo normal. El estornudo tampoco era del tipo corriente. Supongo que se trataría del modo especial para los asesinos."

Volvemos en dos semanas con "El misterio de Sittaford"

lunes, 16 de marzo de 2015

El misterio de las siete esferas

Una quincena más seguimos leyendo a Dame Agatha. Este libro en teoría es del Superintendente Battle, pero su participación es bastante tangencial. Volvemos a encontrarnos con algunos personajes que conocimos en Chimneys, que siempre está bien volver a encontrarse con gente como Buncle.

Parece que estamos ante uno de los libros que van a subir al Olimpo del Agathómetro, veremos qué opinan nuestras lectoras

Empezamos por Pi :

Prejuicios es leer "Chimneys" en las primeras hojas y pensar "Verás que tostón de libro".  A aquellos que no nos sigan desde el principio les diré que este es el segundo libro de Agatha ambientado en la misma finca. Y que el primero me pareció un rollo.
Con esta alegre predisposición comencé a leer "El misterio de las siete esferas". Reconocer personajes de "El secreto de Chimneys" no ayudó mucho; los pimpines metidos a detectives tampoco.
Pero aquello va avanzando y y el libro me engancha. Los pimpines no son tan tontos, las cosas no son lo que parecen y la historia va cogiendo una profundidad importante. Tanto que no echo de menos a Poirot... Oppps, ¿He dicho yo eso?
El final es tan sorprendente que no voy a comentar nada al respecto. No quiero arriesgarme a daros pistas.

Esto es lo que nos dice Paula

En esta ocasión volvemos de nuevo a Chimneys, donde ya vivimos un misterio deliciosamente disparatado con crimen internacional en el pasado. En general confieso que me gusta mucho cuando un autor usa sus propias creaciones para construir sobre ellas, se puede leer sin conocer la anterior, pero reconocemos elementos, es decir, percibimos olores del pasado de lo más interesantes, ahora Chimneys se ha convertido en una casa con multitud de habitantes de paso ¡Ah, la decandencia!

Tenemos un asesinato que empieza con una broma graciosísima de puro inocente, seguido de un segundo asesinato y, ya que estamos en Chimneys, aparece una sociedad secreta llena de extranjeros a la que los protagonistas quieren dar caza porque hay una fórmula que, en malas manos, sería peligrosa para la paz mundial... A estas alturas, como es Agatha Christie sabemos que nada es lo que parece pero, hasta que se desvela el misterio, no sabemos qué es lo que no es lo que parece y qué es lo que es exactamente lo que parece. 

¡Oh! y cómo no, matrimonios y amor, que sé que lo digo mucho, pero hay que ver qué obsesión tiene esta mujer con que sus protagonistas femeninas se casen... y qué divertido lo hace.

Annie nos cuenta qué le ha parecido

Debo de estar un poco tonta porque me costó reconocer de dónde me sonaba Chimneys, al principio no sabía si era un simple déjà vu, luego ya caí en que Agatha ya nos había llevado allí hace tres o cuatro casos. A falta de saber lo que opina Paula, me arriesgo a decir que vamos a coincidir todas. Es muy entretenido y con un final muy sorprendente. Para mí más sorprendente aun que el final de Ackroyd. Tiene menos vueltas de tuerca de lo habitual pero más acontecimientos y mucha emoción. Creo que he pillado algún agujero en la resolución pero me da igual, tanto que ya os dije hace varias reseñas que no me tomo la molestia de volver atrás para comprobarlo.

Y lord Caterham y su indolencia infantil me siguen divirtiendo. Aquí dos de sus frases lapidarias:

"-Quizás asesinen a George - comentó lord Caterham esperanzado"

"No es la muerte, papá -dijo Bundle-, sino el matrimonio.
- Lo cual es casi tan malo - observó lord Caterham."

La ausencia de correctores de estas ediciones sigue haciéndose patente para mi dolor. El traductor es incapaz de distinguir entre "deber de" y "deber". Además en éste he encontrado este loísmo como una catedral que tampoco parece que moleste a los señores de Molino "-prosiguió su esposa, sin hacerLO mucho caso-" ¡Ay!

Y terminamos con Bich

Sensacional. Extremadamente entretenido, se pasa leyendo, empiezas a leer y no te apetece dejarlo. Buncle es un personaje estupendo, está llena de vida y es fácil imaginársela. Podría ser perfectamente amiga nuestra, nadie diría que el libro es de 1929.

Me lo he pasado muy bien todo el tiempo, he estado en tensión en los momentos en los que se supone que había que estarlo, he sufrido, me he puesto nerviosa...y en las últimas páginas del libro me he leído tanto que la señora que iba enfrente de mí en el metro me miraba toda intrigada.

Nunca había señalado tantas cosas en un libro de Agatha, pongo solamente un par de ellas:

"No deberías disparar contra la gente. Me atrevo a decir que muchos se lo merecen, pero hacerlo no te traerá sino disgustos."

"Sólo supe decirle llanamente "No, no quiero". Creo que debí haberle dicho algo acerca de que agradecía el honor que me hacía y otras cosas por el estilo. Pero me desconcertó tanto que acabé saltando por la ventana."


El día 30 volveremos por aquí con "Muerte en la vicaría" donde POR FIN nos encontraremos con Miss Marple.

lunes, 2 de marzo de 2015

El misterio del tren azul

Seguimos con Poirot de protagonista. Esta vez con El misterio del tren azul, publicado en 1928. La hija de un millonario es asesinada en un tren camino de Niza. Entre sus pertenencias se encuentra el famoso rubí "Corazón de fuego", regalo de su padre. La víctima se está divorciando y mantiene una relación con un vividor de dudosa reputación. ¿Venganza?¿Robo? La respuesta en este apasionante libro de Agatha.

Vamos a ver qué es lo que piensa Bichejo de esta novela:

Este libro también me ha gustado. Las cosas en realidad no empiezan a pasar hasta después del primer tercio de la historia, pero viene bien que te presenten a todos los personajes.

Es Poirot, que eso siempre es un valor añadido (aunque estoy deseando llegar a Miss Marple), y es un tren...quizás fue el germen de Asesinato en el Orient Express!!

Me gusta mucho cuando los personajes no son quienes dicen ser, cuando parece una cosa y es otra, cuando hay suplantaciones y disfraces. No entiendo mucho la necesidad de que en cada historia haya que meter un poquito de romance, a veces un poquito traído por los pelos y esta vez, lo del componente sobrenatural, aunque creo que no le pega nada ni a Dame Agatha ni al personaje, me ha gustado. 


Annie:

Este Poirot me ha encantado. Supongo que precursora del Orient Express (cuya adaptación al cine he visto un montón de veces) pero tan entretenida como ella. Lo tiene todo: aristócratas faltos de dinero, maridos infieles, esposas no más ejemplares, millonarios americanos, peristas de altos vuelos... hay hasta una 'solterona' heredera por sorpresa. Y como siempre ninguno es lo que parece y todos son sospechosos. No aparece Hastings pero la verdad es que no le echo de menos.

Me encanta aprender cómo era la vida de los ingleses pudientes en los años veinte. Qué maravilla tenía que ser pasar el invierno en la Costa Azul sin el frío inglés y sin las preocupaciones del que nació en según qué cunas.

Por si nos quedaban dudas de la modestia de Poirot, aquí nos encontramos lo siguiente "Me llamo Hercule Poirot - contestó en voz baja - Y soy, sin duda, el mejor detective del mundo". Ahí queda eso.

Paula:

Otra novela de Poirot donde Poirot es más Poirot que nunca (sé que lo digo constantemente, pero es que se va superando novela a novela, se ve que dio con la tecla y ¿para qué cambiar?) 
En esta ocasión al borde de un tren (¿se estaría preparando Doña Agatha para el maravilloso Asesinato en el Orient Express) se produce el asesinato de una rica heredera que pondrá a trabajar las insufribles e incomprensibles células grises del detective belga, con el desconcierto de todo el mundo, con miles de secretos, y donde es sencillamente imposible (y ya van unas cuantas de Poirot en este proyecto Agatha) seguir el hilo de sus pensamientos ¡es todo tan disparatado! A estas alturas ya da igual quién sea, pero es tan divertido ver cómo llega a la conclusión y los caminos que recorre.
Se vuelve a notar, con acierto, la mano femenina... siempre nos imaginamos a las mujeres de antes de ayer como dicta la más estricta moral y ahora sólo puedo decir ¡qué divertidos los años veinte!

Pi:

Vuelve Agatha en estado puro a través de un Poirot que se ve envuelto en un asesinato doméstico, de los de toda la vida. Es sospechoso el marido, el amante, la doncella, y cualquiera que pasara por allí o ni eso. Todos tienen sus motivos pero ninguno la oportunidad clara de hacerlo. Al final por supuesto nada es lo que parece. De las novelas que llevamos esta es una de mis favoritas. El suspense se mantiene durante todo el libro y el final logra sorprender. Me encantan las novelas de misterio con epílogo. Esas que acaban pero quedan cabos sueltos que finalmente se resuelven en una conversación con Poirot meses después.

La siguiente novela de Doña Agatha será El misterio de las siete esferas y hablaremos de ella en dos semanas.